CAPITULO 28
Vixen llevaba así todo el día, rascándose la barriga tirada en el sofá.
El día anterior había ido a hacerse unas fotos, durante todo el día. El problema con esos trabajos es que, hasta no salir la campaña de publicidad, ella no cobraba.
Las facturas estaban por llegar, y aunque tenia el dinero, pagar el gasto significaba que se quedaría sin mas para el resto del mes. Tenia algunas pintoras publicadas para vender, pero no era suficiente. LA vida en la ciudad era muy cara, y ella se rehusaba a pedirle dinero a sus padres. Sabía que, si lo hacía, la obligarían a volver al pueblo. Y pedirle a Ankar, como que tampoco era una opción.
El otro dilema, era el asunto de la universidad. Aun cuando no iba a la academia de más prestigio que ella quería, costearla era cara sin ninguna beca, lo tenía que pagar ella. Y a este paso no llegaría ni a empezar. Vixen se fue de su casa porque iba a estudiar para convertirse en una actriz, todo lo que hacía, era para perseguir ese sueño. No hacerlo, era como darle la razón a sus padres de que esto era una pérdida de tiempo, ella se negaba.
Su móvil comienza a sonar... un número desconocido:
“Mira, seguro es la UNI por la información que he pedido”
-Hola!?
- Hola, eh, disculpa, ¿es el número de Vixen Neumann?
- eh... si....
- ah que bien. Bueno, a ver, primero no te asustes, Kristy me ha dado tu número, me ha dicho que si hay alguien que me puede ayudar en lo que necesito eres tú.
- ¿eres amigo de mi prima?
- sí, nos conocemos hace un tiempo. Estuve una larga temporada en tu pueblo, ahora me mudé y ahí es donde empieza mi problemilla. Te explico, quiero redecorar la casa donde estoy ahora, pero yo de gustos cero. Tu prima dice que se te da muy bien, me dijo que la casa de ella y la de tus padres básicamente la decoraste tú.
- jajaja nooo… realmente fue mi madre yo solo la ayude un poco con las ideas – Vixen avergonzada…
- Bueno, eso ya es algo mejor de lo que yo podría hacer. Confió en Kristy, si me dio tu número para esto es por algo. No se si estarás ocupada, pero tu ayuda me vendría bien. Al menos decirme por donde empezar. Por supuesto, no tengo que decir que te pagaría.
- Bueno, es que yo no soy profesional. A lo mejor te hago un bodrio, no tengo ni un Book de referencias, ni nada
- he visto la casa de tu prima, eso para mí es referencia suficiente, he comprado algunos muebles, pero ni sé qué hacer con ellos para que se vea bien, los veo y no sé cómo ponerlos, es más creo que no me caben en la habitación. Al menos hecha un vistazo y me dices como colocarlos. ¿Aceptas?
Vixen lo piensa unos segunditos, se siente insegura con sus capacidades como para tomar una casa ajena a su familia y cambiarla, y más de alguien que no conoce. Pero el dinero le hace falta. Pensándolo detenidamente, lo peor que puede pasar, es que no le guste.
- vale, voy a intentarlo
- perfecto, te dejo la dirección y ya me dices el día
- pues mañana estaría bien...
- ok, entre más rápido mejor. Te paso la dirección por un mensaje. Nos vemos mañana. Avísame cualquier cosa.
- vale, hasta mañana.
“Perfecto, se me olvido preguntarle el nombre… genial, soy tarada”
Igual va escribirle a su prima antes de cualquier cosa, al menos corroborar la historia antes de ir. Por supuesto, a Ankar ni le contara... Mejor evitar drama, al menos de momento, porque seguro no le deja ir.
Al día siguiente...
Vixen se va bien temprano, según la dirección pudo comprobar lo lejos que quedaba de San Myshuno. Incluso más lejos que Windenburg. Lo mas raro es que para llegar a ese lugar no había ni bus, ni tren. Tuvo que caminar un buen rato.
"qué lugar más raro" - se estaba comenzando arrepentir de no haberle dicho nada a Ankar
Vixen tenía una extraña sensación, nunca había estado ahí estaba segura de haber estado lo recordaría, pero por alguna razón le era demasiado familiar, como un déjà vu.
El sitio era bonito, pero siniestro como él solo, y eso que era de día. Sabre todo el castillo que se veía a medias a lo alto de la colina envuelto en una niebla espesa.
"porque me es tan familiar..."
Vixen confirma su GPS desde el móvil, casi se sorprende (y agradece) que hay señal.
"Valla casa, a ver si no se estará cayendo a pedazos”
- "Vixen?"...- escucha desde la parte de atrás de la casa
- eh... si...
- ¡hola!... Soy Angel, soy el tío que te ha hecho venir hasta aquí.
Vixen se sorprender, tenía razón su prima, es guapísimo, fue lo primero que le dijo con detalle:
- Hola, ayer se me olvido preguntar tu nombre, tuve que llamar a mi prima.
- que idiota soy, fue lo primero que debí decirte, lo siento.
- no… no pasa nada - Vixen está un tantito incomoda y no sabe muy bien, por qué.
- ¿Te costó llegar?... sé que es lejos, pero no te preocupes que el pasaje también te lo pago.
- tampoco hace falta. Entonces, dime… ¿qué es lo que necesitas?
- ¿No lo ves? Mira la casa que me ha tocado vivir, esto está para tumbar y volver construir básicamente.
Los dos se ríen, Vixen sabe que no miente.
- ¿y porque te metiste a vivir en una casa tan vieja?
- La casa es de un pariente, bueno, ERA, la he heredado. Ya sabia que era vieja, pero no tanto. Tampoco es que me moleste del todo, quiero decir, voy a estar una larga temporada por estos lados, pero en lo que pueda volveré a viajar. Lo que quiero, ante todo, es una habitación totalmente mí, para relajarme y trabajar a gusto. Como te dije, intente hacerlo yo, compre unos muebles, pero ahora no se que hacer con ellos. Veo todo eso y la habitación y no sé si cabra. Ven, mejor lo miras con tus propios ojos. Es arriba, el ático.
Angel le hace pasar, ella le sigue aún toda extraña, apenada...
- es bastante.... gótica – Dice Vixen viendo la casa.
- es una mierda – Angel que la corrige - llámalo como es, no te cortes.
- bueno... esta es la "maravilla" de habitación... esto es más o menos lo que quiero hacer
- donde están los muebles has dicho que tenías?
- Están en el trastero, te lo voy sacando, aunque primero hay que sacar todo esto, voy a pedir ayuda para hacerlo más rápido. Ya vengo, tomate tu tiempo. Angel baja y deja a Vixen ahí, haciendo sus cosas.
Vixen no podía negar que su prima tenía razón, era muy majo. Había algo en el que le recordaba a Ankar. Tal vez era el sitio, la decoración o el lugar. ¿podría ser un vampiro?
Pero, era de día y le recibió en el jardín... ¿no se supone que se queman?
Extraño, pero de algo estaba segurísima, esto ni de coña se lo contaría a Ankar.
Ya tarde, casi al anochecer, Vixen termina y muestra la habitación a Angel. Esta nerviosísima.
- OMG!!... – Angel impresionado que casi no se cree, es el mismo sitio - por fin siento esto como MI casa.
- Solo necesitaba una pintura y quitar todo eso viejo. Los muebles que compraste hacen todo, yo solo los acomode.
- es perfecta... que tengo una tele, y yo pensando que no entraría en este rincón.
Angel sigue viendo cada rincón en silencio, esta maravillado:
- Sabes, yo solo me conformaba con este espacio, pero ver esto así… me provoca cambiar toda la casa. Podrías hacerlo tú, ya de una vez. - que dices?... ya te dije que no soy profesional, seguro alguien con mas experiencia lo hace mejor que yo.
- pues no sé qué haces que no te dedicas a esto. Tiene el toque, te iría muy bien. Bueno, lo importante, te doy el dinero y ya de paso te acompaño para que cojas un taxi, no es recomendable que pasees por aquí sola…
- Vale, gracias…
- Gracias a ti - Angel se lanza encima a darle un abrazo de esos, como demasiado incomodo por el exceso de “confianza”.
Vixen se sintió rarita, los pelos se le erizaron: - “que me pasa”
Vixen sale a esperar afuera, prefiere hacerlo ahí. Angel le dijo que le esperaba mientras el buscaba su billetera y las llaves para acompañarle hasta la salida de Forgotten Hollow.
Vixen seguía teniendo esa sensación extraña del lugar. La experiencia termino bien, paso un día diferente, haciendo algo que le gusta, y además saco un dinerito extra que necesitaba, para salvar su mes. Estaba contenta por ello, lo que se tenía clarísimo, era que no quería regresar mas nunca a ese lugar.
Varias semanas Después
Vixen está hecha un lio, ahora mismo está super confundida en la vida, no sabe qué hacer. De niña siempre quiso ser actriz. Lo ha soñado desde siempre, se metió en el mundillo del modelaje, porque le dijeron que era una buena forma de comenzar, un trampolín. Desde ahí se imaginó que su anhelo cogería forma poco a poco. Pero ahora mismo no se sentía segura. Había hablado su Manager, Izzy Fabolous, para que por fin le ayudara abrirse camino por ese campo. La respuesta era siempre la misma: "olvídate de eso, tienes una cara hermosa, pero solo eso, no hay chispa ahí Vixen, céntrate para lo que de verdad sirves"
Esto cada día, le destruía mas sus esperanzas, de verdad se lo creía, no tenia talento.
Su otra opción era terminas sus estudios en Bellas Artes, pero le aburría horrible. Al final estaba ahí en la ciudad, persiguiendo un sueño que cada vez le era más imposible. Y, sobre todo, con gastos que cada vez se le hacían mas imposibles. Ni para pagar un cursito le alcanzaba.
Se acordó de lo que le dijo aquel chico, a lo mejor debería dedicarse al Diseño de Interiores. No solo había remodelado esa habitación, sino que también se encargo de remodelar completamente el de Charly y Valentina. Lo disfruto a lo grande, pero sobre todo porque Derek, el novio de la Charlotte, le dijo, que gastara lo que quisiera, no había limite.
Aun así, no llenaba esa ilusión que tanto le daba imaginarse interpretando cualquier historia vestida y recitando líneas poéticas.
Estaba tan metida en sus pensamientos que ni se dio cuenta que tenía visita.
Ankar en silencio, la observaba, sabía que estaba distraída, algo le preocupaba. Otra vez sentía esa punzada de frustración por no poder entrar en sus pensamientos. Nadie podía siquiera imaginar lo que él daría por poder hacerlo. Aunque siendo honesto, esa era la razón por la que él se acercó a ella y le atrapo... le intrigaba, era todo un rompecabezas para él, Algo que no suele pasarle con los demás.
Se sentó afuera a esperar, ya se dará cuenta. Aunque viendo que no lo hacía, hizo ruiditos para que por fin le viera, no era plan de estar ahí toda la noche, tenía cosas que hacer.
Vixen se da la vuelta de un susto, de nuevo creyó que la mente le estaba haciendo una mala pasada, pero al momento se relajó. Ver a Ankar siempre le hacía feliz, aun cuando hubiese drama luego.
- ¿no es muy temprano para ti?, no ha terminado de caer la noche y has venido a verme… tanto me extrañabas?
- no, solo que hoy tengo cosas hacer.
- ¿no te vas a quedar?
- no puedo, solo he venido un rato antes de salir de San Myshuno
a Vixen ya le enciende la vena celosa: - ¿a dónde vas?
- a trabajar....
- ¿no se supone que trabajas en el Eliseo?
Ankar se ríe: - yo trabajo en todos lados, Vixen.
Ella pone morritos, el hace lo mismo, imitándole.
- ¿y a ti que te pasa?... ¿no te ha pagado bien el estirado aquel?
- me ha pagado si... pero ya casi no me queda nada
- ¿ya te gastaste el dinero? – Ankar sorprendido.
- sí, tenía que pagar deudas. Además, compre algunas cosas para la casa que me hacían falta, sobre todo para la cocina que no paraba de dañarse.
- ¿cuánto te pago?
- no te voy a decir eso
- ¿por qué?...
- porque me dijo que no te dijera - Vixen se ríe para picarlo.
- Vamos a ver, él te dice algo, y si le haces caso - Ankar dolido
- Eres un drama – Vixen que se ríe de el – ven ya te digo
Vixen coge el teléfono para revisar sus cuentas. Casi le da un infarto al ver la cantidad.
- ¿¿¡¡y esto que es!!??
- qué cosa? - Ankar se acerca, curioso........
- 250000!!?... de donde ha salido todo este dinero??
- ¿eso te pago? – Ahora es el que esta de coña.
- esto no es de él. Ankar, que es esto?
- dinero, obviamente
- ya lo sé, joder. ¿Pero esto, tienes tu algo que ver?
Ankar la mira a los ojos, sonriendo:
- eso fue lo que le saque al pijo aquel, por el piso de su novia. No pensaba vender ese piso, pero mira, seguro tu le das mas utilidad a ese dinero que yo. A ver si así paras de quejarte de que no tienes dinero.
- me estás dando 250.000 simoleones así sin más... ¿quién coño regala 250000, Ankar?
- pues yo... – Él sonríe como si fuese el novio trofeo.
- no los quiero - dice Vixen decidida
- pues dónalo y listo….
Vixen lo mira atónita… no deja de sorprenderla con cada locura.
- estas como una cabra, de verdad que no te entiendo nada
Ankar ríe, la verdad es que a él le importa una mierda el dinero. Unos casi 700 años le han enseñado que eso no vale nada. Para él, negocio de verdad es la información, saber de todo el mundo, a detalle y poder hacer uso de eso a su antojo. Eso es control.
- aun así, no me has dicho que te pasa, Vixen
- pues ya me había olvidado y todo - dice Vixen con toda honestidad, a ella si le valen 250000 - es que no sé qué hacer. Es todo, tonterías mías.
- ¿que no sabes qué hacer?
- pues con mi vida… estoy aquí sin rumbo, toda perdida.
- ¿no se supone que iba a estudiar?
- Si – Vixen que de nuevo se siente de bajón - Ahora mismo no sé si vale la pena, si estudio algo es sola para callar a mis padres
- Ahora mismo te puedes comprar un título si te da la gana
- ¿qué voy a estar comprando un título, loco!?
- ¿qué paso con ese sueño de actriz?
- pues que no valgo para eso
- ¿quién coño te ha dicho semejante estupidez?
- pues mi manager
- Manager… - Ankar resopla enojado - te he dicho que mandes a tomar, a ese gilipollas un montón de veces.
- que no puedo, Ankar. Te recuerdo que tengo un contrato de exclusividad por 5 años.
- Vixen, busca otra agencia y ya está.
- y que hago con el contrato
- Yo me encargo del puñetero contrato.... tu busca ve buscando otra agencia y punto.
Vixen calla, sabe que es verdad lo que él dice, necesita otra agencia. Pero no quiere tener que meterse en un escándalo por culpa de un contrato.
- ¿de verdad crees que tengo futuro cómo actriz?
- desde que te conozco no has parado de hablar de lo mismo. Deja de estar de lo que dicen los demás de ti, haz lo que te dé la gana.
- estaba pensando dedicarme al Diseño de Interiores, hacer lo que he hecho en casa de Charly.
- ¿y meterte en casa de extraños?... no no no no no.
- ¿en serio no te puedes quedar? - Vixen intentado hacerle cambiar de opinión
- No, no puedo quedarme. Te lo he dicho. Mañana ya me quedo, además hoy está el bastardo aquel visitando a su “princesa”.
- ¿Por qué te cae tan mal, Derek? No es que sea muy simpático, pero para que le tengas tanto odio tiene que ser por algo.
- no lo entenderías. Simplemente, es un Ventrue.
En efecto, Vixen, no lo entiende.
- me voy ya - Ankar se despide.
Vixen va feliz de la vida. Con muy poco, Ankar le ha hecho sentir feliz de nuevo. Sin contar que tiene la cuenta llena de dinero para no preocuparse. Ahora mismo puede permitirse pagar cualquier lugar para sacar su carrera. Porque si, va sacar su Licencia como Actriz.
Ankar al salir puede ver que no está solo en el lugar. Ambos se ven.
El Brujo regresa a la puerta del apartamento de Vixen.
Y marca la puerta con señal mágica de protección. O tiene como echar a la cosa aquella, pero si puede no permitirle entrar.
- FUERA DE AQUÍ
Y lo que sea, que se le acerco... se marcha, sin poner resistencia.
Comentarios