CAPITULO 10
- ¿te has burlado suficiente de mi!? ¿te ha gustado mi cara de payaso? (acento italiano muy marcado)
- nooooo... lo juro!!, de verdad señor Vitorino, me confundí... por favor créame
- te voy a enseñar como se tratan a las ratas como tu, aun con todo lo que hice por ti. De aquí no sales basura de dos patas...
Victorino esta tan inspirado en su discurso que ni se da cuenta, que tiene un espectador silencioso
- ¿vas a terminar algún día? - escucha y pega un brinco que casi muere del susto
James también lo ve, y a juzgar por la reacción de Vitorino prefiere no moverse, además tampoco podía hacer mucho gracias a la paliza que le habían dado
- eeh... señor... no le esperaba por aquí... estoy arreglado este asunto... este tendrá su castigo... - Vitorino tartamudeando.
- "eh... eeh.. eh..." - Aemon burlándose - tu problema es que hablas demasiado
El italiano se calla, no tiene ni idea de porque Aemon esta ahí, no sabia si venia a por James o incluso el, ya era la segunda vez que la cagaba en menos de un año
Aemon le mide con la mirada; que obsoleto esta el viejo este. Miraba al chico que seguía en el piso intentando volverse invisible
- y tu que, te busco una almohada con una mantita?
James se levanta como puede, no dice nada. Quien era este señor, se supone que todos temían a Vitorino, ahora se entera que este le tiene terror a ese Señor. Incluso el mismo estaba aterrado solo de verle: "voy a morir" pensaba.
- al menos ya has dejado de contratar a matones de segunda. Esta "rata" te la ha jugado y tu ni te diste cuenta. El no tiene la culpa, le has malcriado, le diste un premio cuando aun no terminabas de enseñarle quien es el que sujeta la correa.
- tendrá su castigo , señor!! yo mismo me encargare que sufra...
- ¡Silencio! ¿Cuántas veces has dicho lo mismo?. Por suerte me he adelantado; Sven!! - Aemon llama, y aparee el albino... pero no esta solo
A James se le va el espíritu del cuerpo, no puede creerlo, es Diana!!
- entonces si la reconoces - le dice Aemon a James, viendo su cara de pánico.
Este no dice nada, no puede hablar. La ha metido en este lio y ahora le van hacer algo por su culpa
Diana no para de llorar, no entiende nada ¿Qué hace James ahí?, ¿Quiénes son esos tíos?, ¿Qué tiene que ver ella en todo esto?
- James... ¿Qué es esto? ¿Qué pasa? - dice llorando en el suelo demasiado asustada.
A James, se le olvido hablar
Aemon se acerca a Diana, le ayuda a levantarse como todo un caballero:
- sssh... sssh... calma chiquilla
Diana deja de llorar como por arte de magia, de hecho parecía que había quedado como enamorada a primera vista de Aemon
- no le hagas daño... por favor - se escucho a James decir en un susurro casa inaudible
- estas aquí, porque tu amigo cometió la estupidez de elegirte a ti para una trampa para proteger a otra. Además, en vez de comportarse como un hombre y dar la cara, decidió mentir diciendo que no te conocía. Creo que entiendes perfectamente que hay que darle una lección, ¿verdad?
Diana asiente con la cabeza medio atontada, esta hipnotizada. James empieza a llorar, en silencio, mientras Vitorino ni se atrevía hablar, estaba quieto, sabia que la cosa se pondría fea.
Aemon se acerca hasta James, le miraba directo a los ojos. El chico sentía que le apuñalaba con la mirada, no podía aguantarlo, bajo la mirada, estaba temblando
Ahí mismo Aemon mira a Vitorino, no le dice nada. Estaba cansado del viejo, hartito lo tenia, ya no le servía. En cambio James... había una chispa, escondida, pero estaba ahí. Solo había que "educarlo" y hacerle explotar.
Después de estudiar a cada uno de los Hombre con traje, paso directo a Sven, como si un padre conversara con su hijo:
- un año entero sin comer, lo has hecho bien, pero la única manera de saber si de verdad has doblegado totalmente a la bestia es dejándola salir.
Sven, marco una pequeña sonrisa, por fin podría hacerlo, de inmediato salió su forma oscura... llevaba meses muriendo de hambre, luchando con su sed, ahora podía dejarla salir.
Diana, salió de su hipnosis y pego un grito desgarrador
James se tapaba la cara: - que estaba pasando!!... por favor, dios, nooo!
El albino fue directo a Diana y comenzó a despedazarla con las garras y colmillos
La chica gritaba de horror, daban escalofríos solo escucharla, James no podía con el escenario que se estaba montando delante de el. Se tira al piso, con toda la culpabilidad del mundo a sus espaldas, porque era su culpa. ¿En que se había metido? Aun trabajando con mafiosos, jamás imagino ver algo así.
Los gritos de la chica se iban apagando poco a poco, hasta que solo se escuchaba a Sven rugir, había comido, pero el tenia un serio problema de control, una adicción enfermiza, siempre quería mas y justo detrás de el, habían dos humanos listo para ser devorados.
James se tapa la cara "ahora si, voy a morir", es en lo único que pasaba por su cabeza mientras lloraba y Vitorino por su parte, estaba seguro que iba a sufrir un infarto, de hecho, deseaba que le diera primero un infarto y morir de un solo golpe.
El vampiro lanza un rugido y se les va encima para devorarlos, pero a mitad de camino escucha un "Sven!" a modo de orden.
El albino se doblega, con mucho dificultad, Aemon lo estaba observando, a el también lo estaba evaluando. Sino se controlaba, El Antiguo le mataría. Tiro de toda su fuerza de voluntad que encontró y detuvo, jadeaba del esfuerzo por mantenerse a raya.
Aemon no dijo nada mas, el vástago parecía haber progresado bastante, aunque no lo suficiente aun.
Sin embargo, parecía satisfecho por el momento...
- es hora de irse, ya casi amanece.
Se da la vuelta, como si nada horrible hubiese pasado, muy normal todo
James le ve, tanta frialdad le ha impactado, ni en sus pesadillas se hubiese imaginado algo así.
- Es la ultima Vitorino, no pienso dar mas lecciones - dice Aemon antes de desaparecer
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