¡¡SILENCIO!!

CAPITULO 33

Hoy se celebra a lo grande en el Eliseo, Fernando tiene un invitado muy especial.

Después de tanto tiempo, parece que por fin a encontrado su "ride to die" para esas noches locas. Tenía todo preparado para montar una las buena, en la sala más VIP del Eliseo, junto a muchas personalidades del medio y claro, algunos Cainitas importantes. Todo tenía que ser perfecto.

Vixen llega al Eliseo, hay una fila para poder entrar, se da cuenta que son muchos los que se quedan afuera, rogando para que les dejen pasar, aun cuando tienes dinero par pagar. Así de exclusivo era. Le pareció genial imaginar, plantarse ahí, al frente de la seguridad, y decir: "Soy la novia del jefe" y poder pasar mientras todos la miran muy posiblemente, con envidia.

Pero seguro que, si lo decía, lo que se ganaba era un tostón y la echarían peor que esos ahí rogando. Si avisaba, Ankar no la dejaría entrar, no estaba segura de que el estuviese ahí, dado que seguía desaparecido sin devolverle las llamadas. Daba igual, ella estaba decidida a lo que venía. Se la sudaba ya todo. Esa noche, entraba en Eliseo.

En eso, se acordó de la Faraona, le dijo que estaría ahí y que la llamara, ella era cliente fija del lugar, seguro le ayudaba a pasar, pero al coger el teléfono, se acordó que era imposible, la pantalla estaba toda rota y Siri no le respondía adecuadamente. En fin, el teléfono quedo hecho un cristo, gracias a su rabieta.

Se tuvo que conformar con esperar y ver que le decían, Entraba sí o sí. Al menos así seguro saldría Ankar. Era todo lo que realmente quería. Verle a él y pedir explicaciones.

Al llegar a las puertas se iba a ser la loca, pero el segurata la detiene. La mira un segundo y evidentemente la reconoce: tú no tienes permitida la entrada, lo siento.

- ¿Perdona!? – Vixen en una actuación de victima indignada… parte de su plan. Si ella tenía que montar un pollo lo armaría.

- señorita, por favor retírese...

A Vixen le están subiendo las palabrotas desde el estómago, pero justo antes de soltarlas y hacer su “performance”, se escucha una pelea de las buenas justo al lado, dos tíos (y con toda la pinta de vampiros) se caían a golpes sin importarles ocultar nada, delante del “Ganado”, los de seguridad salen corriendo alarmados, antes de que se hiciera un problema para la Mascarada, y dejan las puertas vacías un instante, para ir a separarlos y echarlos.

Vixen que no se sorprende ni en lo más mínimo, mientras todos en la fila flipan con lo que parece han visto, aprovecha y se cuela dentro lo más rápido que puede. ¡¡¡La suerte que ha tenido, casi ni la cree!!!

Por fin, esta adentro, está dentro de Eliseo. Las veces que imagino el lugar. Era un antro, sin dudas, pero era el típico antro fabuloso de las pelis esas increíbles de la ciudad. Todo tipo de gente, sin importar la clase social (ni especie) bailando, bebiendo, gritando, ligando. Todos con unas pintas más fabulosas que otras. Lo más cercano que ella había conocido, de una lugar como ese, era la posada Fashion de su pueblo.

En una situación distinta, estuviese disfrutándolo al máximo. Pero hoy, era otro caso, estaba nerviosa y además cabreada. Tenía miedo de lo que podía terminar eso ahí, después de todo, estaba buscando a Ankar en un sitio que le había repetido hasta el cansancio que no debía entrar. Después de su conversación con Ángel, Vixen necesitaba muchísimas respuestas. No se lo creía. Sabia que Ankar tenía muchos secretos, no era tonta tampoco, pero pensar de “elegirla” y lastimarle, era algo que no le cabía en su cabeza. Simplemente no aceptaba que el amor de su vida fuera realmente un monstruo.

A pesar de que Ankar se negaba a decirlo, ella estaba totalmente segura que él, la amaba, a su manera, pero la amaba tanto como ella a él.

Mientras tanto, arriba en las gradas flotantes, Liam hacia guardia aburrido.

Llevaba muchos días tranquilo, sin pleitos grandes, más que unas riñas tontas. Estaba contento, eso significaba que su trabajo lo estaba haciendo bien. Pero le hacía falta un poco de caos. A veces sentía que estaba perdiendo el tiempo.

Siendo el Guardian del Eliseo, tenía que estar ahí casi todas las noches de la semana. Ya ni tiempo tenía para pelear en La Jaula, y lo echaba tanto de menos, a este paso le iban a quitar su corona.

Y como si sus deseos se hicieran realidad, ve como esa tranquilidad está a un pasito de irse a la mierda. ¡¡Vixen estaba dentro del Eliseo! Las ordenes eran claras a todos los de seguridad, órdenes directas del mismísimo Ankar. Esa chica tenía prohibida la entrada. Muchas cabezas iban a rodar si él se enteraba, que había logrado pasar las puertas principales. Menos mal El Príncipe no estaba esa noche en el Eliseo.

- joder!!!!... - ni un ataque del Sabbat le ponía tan nervioso, al Guardian del Eliseo.

Pero lo peor estaba por venir, Vixen estaba siendo evaluada como sangre fresca, por todos. Y alguien le había puesto el ojo.

Abel, llevaba poco en San Myshuno. Después de pasar y saludar a su padre en casa, tenía mucho que ponerse al día, y el mejor sitio para empezar que se cocinaba en la ciudad, era ahí, El Eliseo.

Lo que más le llamo la atención, es que, al parecer, el Príncipe "no tenía cara", o eso era lo que decían. Hacía ya mucho tiempo, que nadie sabía con certeza quien era realmente el Príncipe. La identidad del verdadero jefe, era la comidilla de la ciudad. Unos decían "Es el Toreador... ese es el príncipe desde hace muchísimo", mientras otros " que no... que antes era el Ventrue"... y otro grupo aseguraba "es el Brujo, cabezota... siempre ha sido el Brujo "

Una ciudad, Un Principado con unos dominios tan grandes, sin una figura real, con autoridad. Para Abel, siendo del Sabbat, no era más que una señal de oportunidad perfecta para empezar el caos.

Por lo demás, el Eliseo no era interesante, mas allá de lo que realmente significaba el lugar. Tampoco era el lugar adecuado para sus sesiones de caza. Siendo un Ventrue, su gusto exquisito no estaba en esos lugares. Lo único que llamo su atención, fue una chica rubia, que parecía estar más consiente que el resto, del lugar en donde estaba, no iba con ánimos de fiesta: "interesante..."

Abel no pudo evitar ver la medallita que llevaba en su cadena. Tal vez, tenia suerte…

- ¿te has perdido muñeca?

Vixen no contesta, ya se había dado cuenta que muchos le miraban, lo que me nos necesitaba era encontrarse y hablar directamente con otro vampiro, que no fuese Ankar.

Abel le mira directo a los ojos:

- ven aquí... - le ordena

Vixen pone aún más mala cara:

- vete a la mierda...

Abel flipa, la dominación no funciona con ella: "sin duda, es lo más interesante de la noche". El la coge con fuerza y la acorrala, Vixen no tiene tiempo de reaccionar y se asusta, pero mucho.

- dime... ¿eres creyente? - Abel pregunta, mientras la huele, descaradamente...

- suéltame...

- nooo... no eres, no eres más que otra que le gusta llevar símbolos sin saber lo que realmente significan. Pero da igual, podemos pasar un buen rato, y seguro más de uno de mis camaradas, te encontraran exquisita

- He dicho que me sueltes - Vixen que está casi gritando, pero la música esta super alta que poco servía.

- sssh... aquí el ganado no grita muñeca

- Hey, imbécil… déjala en paz!! – La Faraona que le sale lo mucho de lo poco macho. que le queda en el cuerpo.

Abel le va brincar encima. ¿Qué es esto? ¿otra mortal ordenándole que hacer a el en el Eliseo? Pero se da cuenta que "El Guardian" está arriba viéndolo, y hablando con lo que parecía toda la seguridad. Abajo puede ver como los seguratas le dirigen la mirada y empiezan a hablar entre ellos.

¿¡Que es esto!?... o le han pillado, cosa que duda ya que a él nadie le conoce, o esta Rubia es de alguien importante como para mover tantos hilos para ser protegida en un lugar así. El Príncipe, quizás.

A lo mejor por eso, es imposible dominarla, ya está bajo su control.

Él se retira, no está en posición de armar una buena ahí. Estaba a punto de marcharse, pero algo le dice que se quede a esperar. Esta mujer podría ser importante, quería averiguar, que tanto podía servirle esa información.

- ¿Estas bien? – La Faraona, preocupada corriendo hasta Vixen.

Ella asiente y le abraza, esta tan feliz y aliviada de ver una cara conocida ahí adentro.

- Ven, yo y las chicas estamos por aquí atrás en nuestra propia sala privada. ¿Por qué no me avisaste que venias... bandida? Aquí como has visto no se puede venir sola.

- Mi teléfono esta hecho mierda, no puedo comunicarme con nadie. Y la verdad es que he venido solo porque necesito hablar con Ankar.

- ¿Ankar?... ¿tu hombre?...

- sí, él es que maneja todo esto - Vixen se siente importante solo diciéndolo

- ¿El fotógrafo!!? Madre mía, de lo que se entera uno. Pues de todas las veces que he estado aquí, y mira que son muchas, jamás lo he visto aquí.

- ¿en serio? - a Vixen le entra la vena celosa al máximo, otra vez - ¿de verdad nunca le has visto?

- No, nunca. El que si vemos siempre es a Fernando, siempre baja con nosotras un rato, pero hoy parece anda con gente muy importante arriba en la sala VIP, por eso estamos aquí abajo. No queda otra. Siempre creí que él era el jefe, mira tú... Vente.

Vixen no sabe que pensar, la ha dejado descolocada, seguro es por que no lo sabe. ¿O es otra mentira de Ankar?

- CHICAAAAASSSSSSS!!!.... mira a quien me encontrado. Ha decidido venir la muy perrita - Dice Amanda al resto.

Todas Saludan a Vixen y siguen su super party invitándola a que se una a ellas.

Vixen saluda también, pero lo poco que quiere es fiesta. Ahora está mucho más cabreada que cuando llego. Al entrar empezó a dudar de si era buena idea, ahora, después de lo que le dijo La Faraona, no había poder humano (o sobrehumano, en este caso) que la sacara de ahí sin decir todo lo que tenía pensado decir, a su "bebe"

Arriba en las gradas:

Liam “respira” aliviado, al ver que el extraño se aleja de Vixen, aunque tranquilo no está!!... Vixen sigue ahí y se ha instalado adentro. Tiene que sacarla, capaz que a Ankar le da por aparecer esa noche, de sorpresita.

- dramaaaaaaa.......... se avecina DRAMAAA, Señores

El baja, y se encuentra con Vixen, sentada con mala cara. Su solución es practica y rápida, cogerla del brazo y sacarla por la fuerza, por la puerta trasera. Pero tiene un dilema, Fernando su otro jefe, y sobre todo el que le paga, le ordeno que todos estos asuntos deben ser resueltos con elegancia y discreción "¡¡esto no es la jaula Liam!!"

Liam se da cuenta que esta con Noami, Herman del mejor amigo de Fernando, y La Faraona, amiga cercana también de él. Seguro que el mismo resuelve esto con más tacto, como a el le gustaría hacerlo, elegantemente sin llamar la atención. Con los nervios que trae el mismo, poco tiene para pensar en estrategias diplomáticas y discretas.

Liam tiene mucha fuerza, no tacto. Fernando estaba en lo suyo esa noche, no quería ser interrumpido por nada realmente importante: "Esto es importante, peor que la Gehena… que se encargue el" El sube a buscarlo, para que al menos le diga como proceder.

Unos minutos después...

- ¿pero como coño se ha metido Vixen al Eliseo, Liam? - Fernando sale hecho un huracán, cabreado y también nerviosísimo

- Que se ha colado, Fer... se ha metido a hurtadillas.

- y una polla.... que es humana, coño. Imposible que se haya burlado a la seguridad afuera.

Fernando apenas ve a Vixen, se mete sin dudarlo y la coge por el brazo para sacarla.

Liam flipa, la discreción a la mierda... era justo lo que él pensó hacer!!

Las chicas están alucinando de ver a Fernando sacar así a Vixen. La Faraona, una vez mas se va a meter, pero Noami la coge del brazo. Algo no muy bueno está ocurriendo y es mejor quedarse al margen.

- pero que haces suéltame!!... - Vixen gritando que ya está hasta la polla que la cojan a la fuerza del brazo.

- sacarte de aquí, Vixen. pero tú te volviste loca!!? ¿cómo se te ocurre desafiar a Ankar, justo aquí?

- Solo me iré cuando le vea y hable con él, no me contesta el puto teléfono durante todo el día, él se lo ha buscado.

- pues para tu fortuna... y la de todos, no está!! Así que fuera - La vuelve a coger por el brazo para sacarla.

- ¡¡que me sueltes!!... joder, ¿que es lo que no entiendes?

- la que parece que no entiende eres tú Vixen, no puedes estar aquí. ¡¡Que nos mata a todos!!

- pero ¿por qué no puedo estar aquí?

- no lo sé y no me interesa. Que hagas o no con Ankar me viene sin cuidado, pero fuera de este sitio. Aquí no se le puede desafiar, Vixen, y tu menos que nadie. Si tienes que hablar con él, lo haces fuera del Eliseo. Pero aquí no...

- pues hasta que no venga el mismo a decírmelo, no me voy

- ¡¡por mil demonios Vixen!! Que te estoy salvando la puta vida… Vamos, antes de que aparezca por aquí.

- tarde.... ya está aquí - Dice Liam, sudando… si pudiera.

- me cago en todo… - Fernando igual de cagado

- todavía hay tiempo... salimos por la puerta de atrás

- tú crees que no se va a dar cuenta – Liam, nervioso, que ya veo el drama venir.

- me da igual, pero que no la vea adentro joder... - Fernando aún más de los nervios e histérico

- que no me voy a ir coño!!!!... – Vixen seguía terca, y más sabiendo que Ankar ya estaba ahí.

Ankar apenas llegar, puede sentir el olor de Vixen. Lo sentía a kilómetros.

Esta cabreado... mucho. podía perdonar cualquier cosa de Vixen, cualquier orden que no cumpliera, pero venir hasta ahí. Esa orden era sagrada, nunca pensó que se atrevería a tanto. Acaba de darse cuenta que Vixen está totalmente fuera de su control. Y eso, lo pone de peor humor.

El cabreo de Ankar es tal, que muchos, humanos y vampiros, notan su presencia y se apartan a un lado, nervioso, para no estorbar.

Vixen, que andaba todo segura y decidida hasta hace unos segundos, se hace mierda ahí mismo cuando le ve.

- Ankar... - dice susurrando, jamás le había visto así, tan serio y dando tanto miedo… y mira que enojado a estado y un montón delante de ella.

Fernando está seguro que siente está sudando. Se toca la cabeza para comprobar que no hay chorros de sangre, brotando de ella. Liam ni habla, esta petrificado.

- No me vayas a joder la noche... por favor - dice Fernando, viendo lo inminente – Hay mucho gente importante arriba.

Ankar los mira, no dice nada, lo que los hace sentir aun peor. Por lo general, es normal que suelte unas palabrotas o grite histérico, pero así… sin decir nada, cagaba aún más.

Amanda y Noami, ven la escena, han salido a ver que ha ocurrido y para hablar con Fernando para ver cuál es el problema de Vixen

Noami reconoce a Ankar, y sabe que es autoridad en el lugar. Algo va mal. Ella mira a Fernando y él le devuelve la mirada... le señala la puerta trasera.

- tenemos que irnos, Amanda...

- ¿Qué dices?

- que tenemos que irnos, YA - repite Noami, haciendo señas a las demás, todo asustada y pidiendo que se apuren, ni los abrigos cogen.

Ankar que sigue sin decir nada ni una sola palabra, por fin coge a Vixen a la fuerza y casi la arrastra para sacarla.

- Ankar!!.... suéltame, podemos salir como la gente normal.

- Silencio!! - Ankar, por fin habla, aunque bastante frio.

Vixen se sorprende, casi no parece su voz:

- Ankar... me estas lastimando, suéltame!!

El ambiente cambia rápidamente, los vampiros empiezan a mirarse unos a otros, viendo la escena.

La DJ también ve lo que ocurre y mira a Fernando, este le da un orden solo con la mirada para que deje de pinchar los discos.

- Cierra la sala VIP, sin que nadie se dé cuenta. Hay que sacar a los humanos de aquí – Dice también dando instrucciones a Liam, y este obedece de inmediato.

Habla por el micro: "código bello durmiente", que no era más que hipnotizar al ganado, y algún otro vampiro pringado, y sacarlos sin que se dieran cuenta de nada, en situaciones de emergencia.

Afuera... Las chicas logran salir a tiempo.

- Espérate un momento, ¡¡¡chica, que se me salen las tetas!!!.... ¿Cómo vamos a dejar Vixen con esa bestia, Noami?

- Amandi, mi amor, en serio… el peor lugar en el que podemos estar ahora es ahí adentro.

- pero y Vixen!!

- Vixen esta jodida, no podemos hacer nada. Hazme caso, por fis, te lo ruego... tenemos que irnos.

- eso o morimos congelados - Dice el otro con cara de drama y asustado.

- Amanda, vamos a casa de mi hermano, y ahí le digo que llame a Fernando para que nos diga que pasa con Vixen. Pero ahora, no podemos entrar ahí.

- está bien... menos mal que no me traje mi abrigo de pieles caro – La Faraona, que de estas cosas "místicas" prefiere hacerse la loca. Si Noami esta así es porque algo chungo realmente esta ocurriendo. Queda aun más preocupada por Vixen.

Adentro, Vixen sigue resistiéndose a Ankar. Ahora todos los vampiros y Ghoul están observando la escena.

les parece increíble que, el que aparentemente, es el Príncipe, no pueda controlar a un humana y se deje vacilar así.

- ¡¡ANKAR QUE ME SUELTES!!! - Grita ella y que ahora se escucha perfectamente porque ya no hay música.

- ¡¡HE DICHO SILENCIO!!! - dice más fuerte cogiéndola aun con más fuerza.

Vixen tiene mucho miedo, por primera vez, siente demasiado miedo al verle.

- ¿Qué te pasa!!?... no tienes por qué hablarme así - Vixen que empieza a llorar.

- Vixen... cállate de una puta vez, por favor - Fernando que esta sufriendo en silencio, también. Lo que esta pasando es muy grave.

Ankar no solo está enojado, esta frustrado, sin poder dominarla, que sigue sin entender que debe obedecer. Al contrario, sigue respondiéndole, sin hacer caso a una sencilla orden como la de callarse.

- no me hagas esto Vixen - Dice el susurrando – calla, calla ya.

- si tú el que me está lastimando.... ¿Por qué me haces esto? - Vixen en llanto, aun sin obedecer

Ankar la suelta, solo hay una manera de obligarla a callar. No puede dominar su mente, pero si su cuerpo a voluntad. Juro que jamás en su vida, lo haría con ella, pero ahora no tenía opción.

- ¿Qué haces Ankar? ¿Qué me vas hacer?........... ¿de verdad vas hacerme daño!?

- SILENCIO, HE DICHO – El más frustrado que nunca.

- ¡¡¡no me hagas daño!!!....... – y ella chillando mientras las miradas siguen fijas en ellos

- Ankar!!!... basta........ tú no eres así... ANKAR!!!!!.......

Vixen empieza a sentir los músculos de su cuerpo contraerse con fuerza, al mismo tiempo puede sentir la sangre de sus venas arder, suben directo a su cabeza, causándole dolor

- pa.....aa..ra.... ...... p.. porr. .q..eee - Vixen casi babeando de no poder hablar bien

Sigue resistiéndose, intenta decir palabras... mira a Ankar con mucho dolor, acaba de romperle el corazón.

Y el, se está rompiendo enteramente, por dentro. Sufriendo igual que ella.

"calla... bebe, por favor... calla"

- ANKAAAR!!... - grita Vixen antes de caer al suelo y empezar a convulsionar como loco.

Abel que no ha dejado de observar todo desde el principio, esta satisfecho de haberse quedado. Si que ha valido la pena esperar un poco. Se ha dado cuenta que tenía razón, era propiedad de "príncipe" pero ni el, puede dominarla: "interesante"

El cuerpo de Vixen sigue sus espasmos, ahora con menos fuerza...

- ya basta... aprendido la lección - Sale uno cualquiera, intentando acabar el show

Pero, no termina ni hablar y Ankar toma el control de él también

- Hay que ser idiota para meterse en asuntos del Príncipe... - se burla otra, disfrutando lo que ve.

El pobre samaritano, empieza a doblarse hasta sentir romper los huesos

- ¡¡San Myshuno no tiene príncipe!!!... - grita como puede en el aire mientras se hace una masa extraña en el aire.

Ni un segundo más, y lo que parecía un cuerpo, termino estrellado con la pared y sin cabeza...

- ¡¡HE DICHO SILENCIO!!! - Ankar se voltea, fuera de sí, por fin dejando de hacer toda magia.

El cuerpo de Vixen deja de agitarse, lo único que se escucha ahora mismo, es el temblor de las paredes a causa del bajo de la música de la sala VIP, que esta ajena a todo lo que pasa, aparentemente.

- ALGUIEN MAS TIENE ALGO QUE DECIR - Ankar mira a todos en la sala, amenazante...

Nadie se atreve a contestar…

- ¿Qué tal tú... eh... nada?... ¿NADIE MAS DIRA ALGO?

Todos siguen en silencio, ahora mismo han visto en persona quien es la verdadera autoridad. Un Brujo, y Nada más y nada menos que Ankar.

- ya veo... todos unos putos cobardes. Al menos ese pobre imbécil ha tenido los huevos de pronunciar en voz alta lo que todos llevan susurrando como ratas. Voy a dejar algo muy claro, y que se les meta en la cabeza desde ya…

- ¡¡¡SAN MYSHUNO TIENE UN PRINCIPE Y SIEMPRE LO TENDRA!!!

Unos sonríen, otros se miran nerviosos, eso sí, aun en silencio.

- ¿algo más que necesiten aclarar!?.... – Ankar que los rodea, mirándolos a todos, igual de amenazante.

- No quiero ver a nadie hoy aquí, fuera de mi vista... TODOS!! – dice al final.

Y todos obedecen, de inmediato

Ya estando solos, Ankar solo se hecha al suelo, junto al cuerpo de Vixen.

- Todavía hay gente arriba - Fernando intentando mantener la compostura, aunque esta bastante afectado - A estos payasos les vale cualquier explicación, pero arriba a estos antiguos, hay que explicarle que ha ocurrido, aquí en el Eliseo

- Están esperando que el Príncipe suba – Liam que acaba de escuchar por el pinganillo a uno de seguridad, que pedía información.

- Hay que sacar a los humanos que quedan arriba, Liam. Se acabo la fiesta, has sonar la alarma de incendios para sacarlos las escaleras de emergencia - Liam obedece y da instrucciones

Ankar sigue en el piso, en silencio. No puede dejar de abrazar el cuerpo de Vixen...

- Maldita sea, Ankar – Fernando intentando mantenerse calmado en medio del caos - se cómo te estas sintiendo, pero todavía hay que resolver lo de arriba, no me dejes solo en esto...

- iré yo... – Le dice Ankar, asumiendo su papel - sácala de aquí, Fernando... Por favor.

- de acuerdo… Yo me hago cargo de ella.

Fernando la coge a Vixen en brazos, y sale con ella por la puerta trasera, mientras Ankar y Liam van hasta el piso de arriba, a dar explicaciones.

Ankar mira salir a Fernando, va roto totalmente por dentro, una vez más…

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CAPITULO 34