CAPITULO I
Lilith intenta terminar de corregir, los exámenes de sus alumnos, cuando Agnes se le acerca y se queda ahí plantada en silencio con cara de “hazme caso”
Lilith supone, que la razón de tal cara, se debe, al enterarse que ha comenzado, de nuevo, los procesos para la adopción de otro pequeño. Agnes montó un drama cuando descubrió la llegada de Yoli y se enteró que ya no sería la única hija; aunque, en aquel entonces, era muy niña. Ahora no se la imagina con una rabieta, pero seguro querrá explicaciones sobre el tema.
- Pasa algo, Agnes?
- Mamá... ¿que es la Camarilla?
Lilith estaba esperando cualquier pregunta, pero no esa
-Siempre te escucho, a ti, a mis tíos, al abuelo y hasta a mi primo hablar de "La Camarilla", ¿de que va eso?
Lilith sonríe, Agnes no era vampiresa, pero había crecido en una familia llena de Cainitas, de hecho, había tardado mucho en preguntar sobre el tema.
- De acuerdo, hoy vas aprender un poco de historia, pero debes saber que, lo que te contaré, debe ser mantenido en absoluto secreto, es algo que debes respetar, esa es la primera regla, nada de ir divulgando esto con extraños, de hecho, mejor que nunca saques el tema, ¿de acuerdo?
Agnes, con curiosidad, asiente enérgicamente.
- Nuestro mundo se divide básicamente en dos sectas: La Camarilla y el Sabbat. Mientras la Camarilla cree que permanecer en secreto, viviendo y mezclándose con los humanos, los hace mas fuertes, el Sabbat quiere todo lo contrario, quiere dominar y esclavizar a los mortales. Hay muchas más sectas, por supuesto, pero al final son estas dos la que dominan, y por supuesto, hay una guerra de poder interminable que lleva siglos así.
- Muchos siglos atrás, Vampiros muy sabios, formaron las bases de lo que hoy es La Camarilla, la torre que nos ha mantenido a salvo a, nosotros, los Vástagos. La Camarilla es la organización más influyente de toda la historia vampírica, el único propósito, es preservar la Mascarada, que no es más que ese velo de engaño sobre los ojos de los vivos para ocultar nuestra existencia. Así es como hemos logrado sobrevivir durante siglos porque, aunque somos inmortales y tenemos “poderes” sobrenaturales muy por encima de los humanos, somos igual de vulnerables.
- Esta escrito, que todo vampiro, pertenece a la Camarilla, da igual de donde vengan, quienes sean o que tengan. En el momento en que nos convertimos, ya somos parte de la secta, y debemos seguir sus reglas. Los Antiguos son muy estrictos con estas las reglas, Las Tradiciones, al fin de cuentas, es por nuestro propio bien. Si no las siguiéramos, terminarían dándonos caza y seriamos considerados Anarquistas y enemigos públicos.
- Serian traidores, gente del Sabbat… no?
- Si, aunque como te he dicho, el mundo no se divide en blanco y negro, hay muchas sectas, algunas ocultas, otras que simplemente no siguen las Tradiciones de la Camarilla a raja tabla, pero tampoco desean el apocalipsis del Sabbat. Hay Clanes de Vampiros que van por la vía independientes, sin molestar a nadie.
- ¿Clanes?... ¿y que es un Clan?
- Son grupos de “familia” en cada secta. De acuerdo con la mitología vampírica, lo que sabemos es que, Caín engendró a tres Chiquillos, que a su vez estos engendraron a sus propios descendientes. Luego vino el Diluvio Universal y estos antiguos desaparecieron y se supone que solo 13 de ellos sobrevivieron. A esos los llamados los Anti-diluvianos, también conocidos como la temible "Tercera Generación". Estos se convirtieron en los progenitores de todos los Vampiros que existen hoy en día. Ellos fundaron los Clanes, que no es más que un legado. La Sangre de cada Antediluviano perdura en cada descendiente como una cadena de sangre, alimentando sus poderes, debilidades y hasta quizás nuestros comportamientos y creencias.
- Por ejemplo, tu abuelo Aemon, tu tío Caleb, Leona y yo, somos descendientes del Ante-diluviano Ventrue, pertenecemos al Clan Ventrue. El clan más fuerte de la Camarilla, al punto que son nuestros antiguos los que la dirigen, de hecho, según la historia, fueron nuestros Antiguos Ventrue los que pusieron en vigor la Mascarada para eludir a la Santa Inquisición en algún momento del siglo XV. En la Camarilla hay otros cinco Clanes: Los Brujah, Los Malkavian, Los Nosferatu, Los Toreador y claro Los Tremeré que, según ellos, son el otro brazo fuerte de la secta.
- O sea, que, si tú me llegaras a convertir, yo también seré del Clan Ventrue...
- Así es, heredarías, de mí, todo el Arquetipo del Clan. Como ves La Camarilla no es más que otra maraña política de intrigas necesarias para poder sobrevivir. ¿Contestada tu pregunta?
- Si... ahora, también quiero decirte, que quiero que me conviertas en una Vampiresa.
Lilith queda muda, no porque le sorprendiera la petición, sino por lo pronto.
Ella siempre sospecho, que su primogénita, se lo pediría en algún momento, pero ahora, que la escuchaba… no sabía exactamente como sentirse.
- ¿Por qué tan pronto Agnes?, apenas eres una adolescente, porque no vives tu VIDA, la disfrutas y ya luego, si quieres, podríamos conversar, sobre esto, otra vez. Ser un Vampiro es una maldición, Agnes.
- Pero Mamá, vivo rodeada de Vampiros, la familia entera, que conozco, son Vástagos, hasta mi primo Cobain es un vampiro, tus amigos me ven, como una mortal, no como tu hija. Qué pasa si un día, no se controlan y, me muerden ellos.
- No se atreverán - dice Lilith fríamente.
- Aun así… quiero ser un vampiro igual que tú y que mi familia…
Lilith suspira:
- Esto no lo puedo decidir yo, Agnes, como te he explicado, hay reglas y tradiciones que cumplir y el “Abrazo” es una de ella, no se puede convertir a nadie si un Antiguo no lo permite, para hacerlo, primero, debería pedir permiso...
- Bien… el Abuelo es un antiguo, no? puedes preguntarle a él
Lilith lo piensa...
- Pediré permiso, pero, eso no quiere decir que vaya a ocurrir, de hecho, es muy probable que Jamás me permitan hacerlo, y quiero que quede claro eso, si me dicen que NO tú deberás aceptarlo, de acuerdo.
- Vale – Agnes sonríe emocionada..
- No deberías reír tanto. Esto, es serio Agnes… y si de verdad lo quieres, debe empezar a demostrar que lo tomas con la seriedad que se merece.
Agnes asiente decidida
- Ahora ve a dormir, no puedo creer que Yoli este todavía despierta viendo la tele…
- Yoli!! Vamos, a la cama…
- Pero no quiero ir a dormir todaviaaaaaaa!!!!
- No señorita, nada de dramas, a la cama……
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