EN EVERGREEN

CAPITULO VII

Cobain ya llevaba un par de semanas en Evergreen, con su tío, él pensaba que sería como unas vacaciones pero no... nada, ni parecido.

Su tío lo puso a trabajar apenas llegó, había mucho que hacer... siempre había mucho que hacer en ese barrio. Al principio Cobain, ni se enteraba, era más el tiempo que pasaba peleando con la máquina de fabricación y gastando material, que lo que hacía de provecho.

Él lo intentaba con entusiasmo, pero no había manera. La máquina le odiaba.

Viendo a su tío trabajar descubrió el mundo de la robótica. Nunca se lo había planteado y descubrió que era bueno en ello, cada vez era más, el tiempo, que pasaba observando a su tío en la mesa de trabajo, su labor, le despertaba mucha curiosidad. Chelo le dijo que, si quería, podía practicar y que algún día le dejaría hacer las reparaciones de PP.

Y ahí estaba, descubrió que, el asunto, le gustaba y que tal vez... solo tal vez, se decidiera a estudiar Ingeniería.

Al menos Chelo, ya habían logrado despertarle, otra vez, esas ganas de ir al Instituto sin sentirse obligado.

Cobain se sentía tranquilo y la pasaba bien... estar con personas, que no tenían nada que ver con su mundillo, lo mantenía más relajado. "Así vive una persona normal" pensaba, pero nada era de maravilla... el fin de semana le tocaba ir, a casa de Aemon, tal como se lo había dicho su padre. Estaba nervioso: "Que me va enseñar?"

También, desde hacía días, sentía que era observado. Podía suponer que era Ankar, sabía que le "cuidaba", pero había algo que le resultaba distinto... no sabía explicarlo.

Iba directo a casa, parecía que iba a empezar a nevar y, según los pronósticos, habría tormenta, cosa que no era problema para él, ya comenzaba a sentir las "ventajas" del vampirismo. El frío no le afectaba para nada.

En eso escucho, lo que parecía, una chica, refunfuñando sola, en una de las pequeñas plazas del barrio.

Penso: "esa cara.... será ella... como es que se llamaba?"

- Angelic!?

""Ah... y este quién es?" pensó ella, toda perdida...

- No te acuerdas de mi?

- Creo que si... eres el novio de Pinkie... no?

Cobain sonríe avergonzado...

- Bueno... no sé, yo realmente, no sé….si lo era. Vives aquí?

- Vivo justo en esa casa de al frente, he vivido aquí toda la vida y a ti no te había visto nunca por aquí?

- No vivo aquí, solo estoy una temporada.... Y si vives ahí que haces, aquí afuera, en medio de una nevada?

- Prefiero quedarme aquí que escuchar la pelea, de mi madre, con su novio de turno.

- Yo vivo a una calle de aquí, si quieres, podemos ir hasta allá y no pasas frío.

A tu casa?... hmmm... no quiero molestar.

- No seas tonta, no pensaras quedarte aquí afuera helándote, ya luego te acompaño, de regreso

La verdad, no le hacia ninguna gracia quedarse ahí, con el frio que hacia: - hmmm vale...

Llegaron a casa y se pusieron a charlar, no esperaba jamás encontrar a Angelic ahí. Cobain no pudo evitarlo y lo pregunto:

- Sabes que paso con Pinkie?... sigues viéndola?

- No lo sabes? – dijo Angelic sorprendida…

- Un día dejó de contestar mis llamadas y todo... nunca lo entendí.

Su madre murió, o bueno, al menos, esa es la versión oficial que han dado

- Como así?...

- No sé, si te conto que su mama haría un viaje de expedición a Selvadorada?

- Si, y lo último que supe es que estaba súper cabreada por ello.

- Pues su madre no volvió, desapareció con todo el equipo de producción. Con el tiempo que ha pasado la dan ya por muerta, pero es que nunca se encontró el cuerpo, ni el de ella, ni el de nadie.

- Ahora veo, pero…. porque no me lo contó?

- La verdad es que no le contó a nadie, yo lo sé, porque, en el pueblo, fue lo único que se habló durante ese verano. Pinkie cambio mucho Cobain, cuando se enteró de la noticia, las chicas me dijeron que, no veía a nadie, no quería salir de casa y cuando se veían en la escuela no hablaba con ninguna. i Maiko, logro hablar con ella... no quería ver a nadie, además la gente no ayudó en nada.

- Bueno, en ese pueblo, ya sabes, les encanta el chisme y su mamá era el tema perfecto para empezar cualquier cuento, comenzaron a decir que su muerte, o la desaparición, era mentira, que había aprovechado para, por fin, dejar tirada a Pinkie; ya te puedes imaginar lo horrible que fue, para ella, escuchar tales cosas. Lo último que he sabido, de ella, es que Naoko, se la llevo lejos de ahí, se mudaron, y claro, la gente vieja del pueblo, no ha dejado de hablar... ahora el chisme preferido es que, Naoko, se la llevo y tiene un romance con la hija de su EX.

- En serio, de dónde sacan tanta mierda, para suponer cosas así, de la gente.

- Es un pueblo, lleno de gente tradicionalista... y, la familia de Pinkie, nunca cayó en gracia, es como una diversión hablar mal de ellas.

Cobain, al menos, se sacó la espinita que tenía... entendió que el silencio de Pinkie, no había sido su culpa, no era por haberse enterado de quien era el y tampoco estaba molesta con él; pero si le dolió, un poco, que no confiara para contarle lo que había pasado. En fin, era agua pasada, al menos ya sabía que había sucedido.

El resto de la noche hablaron de cosas menos tristes, pasaron un buen rato y, ni se dieron cuenta, hasta que ya era bastante tarde. Ya había dejado de nevar.

- Creo que ya es hora de irme a casa.

- Vale, te acompaño.

- No hace falta, que vivo en la otra calle.

- Venga no seas tonta, te dije que te acompañaba de regreso.

Angelic sonreía avergonzada...

- Pues nada... me alegra que seas, mi casi, vecina. Voy a estar un tiempo por aquí, antes de regresar a mi casa, allá, perdida en una isla. Ya sabes, cuando quieras escapar de tu casa no tienes que quedarte ahí, sentada, pasando frío.

- Yaaa... vale.... estamos hablando entonces... chau.

Al fina, Evergreen, no era tan malo como había creído...

CAPITULO VIII